Estilos arquitectónicos
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Estilos arquitectónicos
Historia de la arquitectura
La historia de la arquitectura traza los cambios en la arquitectura a través de varias tradiciones, regiones, tendencias estilísticas generales y fechas. Las ramas de la arquitectura son civil, sagrada, naval, militar y paisajística.
¿Qué son los estilos arquitectónicos?
Los estilo arquitectónico puede incluir elementos tales como forma, método de construcción, materiales de construcción y carácter regional. La mayoría de la arquitectura puede clasificarse como una cronología de estilos que cambian con el tiempo reflejando modas, creencias y religiones, o el surgimiento de nuevas ideas, tecnología o materiales que hacen posibles nuevos estilos.
Principales Estilos arquitectónicos:
Estilo Clásico
Estilo Románico
Estilo Gótico
Estilo Renacimiento
Estilo Barroco
Estilo Rococó
Estilo Neoclásico
Estilo Modernismo
Estilo Art Déco
Art Déco, también llamado estilo moderno, movimiento en las artes decorativas y la arquitectura que se originó en la década de 1920 y se convirtió en un estilo importante en Europa occidental y los Estados Unidos durante la década de 1930. Su nombre se deriva de la Exposition Internationale des Arts Décoratifs et Industriels Modernes, celebrada en París en 1925, donde el estilo se exhibió por primera vez. El diseño Art Déco representaba el modernismo convertido en moda. Sus productos incluían artículos de lujo elaborados individualmente y artículos producidos en masa, pero, en cualquier caso, la intención era crear una elegancia elegante y antitradicional que simbolizara la riqueza y la sofisticación.
Se extendió internacionalmente, influyendo en proyectos importantes como el Empire State Building y el Chrysler Building en Nueva York.
Estilo Moderno
Estilo Internacional
El Estilo internacional, se desarrolló en Europa y Estados Unidos en las décadas de 1920 y 1930 y se convirtió en la tendencia dominante en la arquitectura occidental durante las décadas medias del siglo XX. Las características más comunes de los edificios de estilo internacional son las formas rectilíneas; superficies planas y tensas que se han despojado completamente de ornamentación y decoración aplicadas; abrir espacios interiores; y una calidad visualmente ingrávida engendrada por el uso de la construcción en voladizo. El vidrio y el acero, en combinación con el hormigón armado menos visible, son los materiales característicos de la construcción. El término estilo internacional fue utilizado por primera vez en 1932 por Henry-Russell Hitchcock y Philip Johnson en su ensayo titulado The International Style: Architecture Since 1922, que sirvió como catálogo para una exposición arquitectónica celebrada en el Museo de Arte Moderno (MoMA).
Arquitectos del Estilo Internacional
Estilo Brutalista
El brutalismo, también conocido como arquitectura brutalista, es un estilo que surgió en la década de 1950 y surgió del movimiento modernista de principios del siglo XX. Los edificios brutalistas se caracterizan por su apariencia masiva, monolítica y «en bloque» con un estilo geométrico rígido y el uso a gran escala de hormigón coloreado. El movimiento comenzó a declinar en la década de 1970, después de haber sido muy criticado por ser poco acogedor e inhumano.
El término ‘brutalismo’ fue acuñado por los arquitectos británicos Alison y Peter Smithson, y popularizado por el historiador arquitectónico Reyner Banham en 1954. Se deriva de ‘Béton brut‘ (hormigón en bruto) y se asoció por primera vez en arquitectura con Le Corbusier, quien diseñó Cite Radieuse en Marsella a fines de la década de 1940.
Estilo High-tech
La arquitectura high-tech (en español alta tecnología) es un estilo arquitectónica caracterizada por integrar componentes industriales y tecnológicos de alta tecnología en la estructura de un edificio. El movimiento arquitectónico surgió en la década de 1960 y se ve como una caracterización de la transición de la arquitectura modernista a la arquitectura posmoderna.
La arquitectura de alta tecnología presentaba la aplicación preferida de superficies transparentes y materiales livianos. El diseño arquitectónico fue impulsado por el concepto de mostrar cómo la tecnología puede mejorar el mundo al colocar las características técnicas de un edificio en el exterior de un edificio. Los arquitectos Richard Rogers y Norman Foster fueron las figuras clave de la implementación de la arquitectura de high-tech en la década de 1970, y los elementos se pueden ver en sus diseños en todo el mundo.
Estilo Posmodernismo
La arquitectura posmoderna, también conocida como posmodernismo (o «pomo»), es un estilo arquitectónico que surgió a fines de la década de 1960 como una reacción contra el modernismo.
La arquitectura modernista se había enfrentado a una creciente crítica por sus rígidas doctrinas, uniformidad y falta percibida de contexto local y cultural. También hubo quienes derivaron el modernismo de Le Corbusier y Ludwig Mies van der Rohe por ser demasiado sombríos, formales y austeros.
Estilo Neo-futurismo
El neo-futurismo es un estilo arquitectónico de finales del siglo XX / principios del XXI. Se desarrolló a partir de la arquitectura de alta tecnología, desarrollando muchos de los mismos temas e ideas. Se ve como una desviación del estilo más escéptico y referencial del posmodernismo, y más como un enfoque idealista del futuro. Su objetivo es repensar la estética y la funcionalidad de las áreas urbanas en rápido crecimiento.
El movimiento tiene su origen en la obra expresionista estructural de mediados del siglo XX de los arquitectos finlandeses Alvar Aalto y Eero Saarinen, así como de los arquitectos daneses Henning Larsen y Jorn Utzon, y otros pioneros como Buckminster Fuller.
Deconstructivismo
El deconstructivismo es una corriente arquitectónica que se desarrolló en la década de los 80 en los Estados Unidos y Europa. Entre sus principales características está la fragmentación, la falta de simetría, armonía y continuidad en las obras diseñadas bajo este concepto.
El deconstructivismo, no es un nuevo estilo arquitectónico, ni es un movimiento de vanguardia contra la arquitectura o la sociedad. No sigue «reglas» ni adquiere una estética específica, ni es una rebelión contra un dilema social. Es la liberación de infinitas posibilidades de jugar con formas y volúmenes.
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